No hablemos de gente 2

Aunque parezca increíble, lo dijimos desde el comienzo. En Garfield, la realidad supera a la ficción.

Basando su estrategia propagandística de que son los más grandes de la zona en numero de seguidores, los que más llenan las canchas argentinas, los que alientan sin cesar, trompetas mariachis incluidas, vemos que nuevamente la realidad les cae contundentemente.

En la tabla superior, y pasadas ya 6 fechas, vemos la triste realidad de Garfield. Qué pocos son. Dicha tabla, elocuente por demás muestra lo siguiente: Primero en público, el equipo que hasta el domingo anterior estaba primero en el torneo, y que divide sus adeptos en la segunda ciudad más grande del país. Está muy bien. Le siguen tres grandes históricos. Ni hablemos entonces. Luego el representante de la capital de la provincia, que divide adeptos también y además de tener el mejor equipo de Argentina, recientemente se coronó campeón de América. Atrás el representante de una provincia, que además acaba de ascender por primera vez en su historia a la máxima categoría. Luego el cuarto "grande" y después otro equipo que como la tabla lo demuestra, posee una seguidora concurrencia y que desde el inicio del campeonato exhibe una importante cantidad de público.

A las pruebas me remito. Todo lo demás es parte de un autoconvencimiento para no darse cuenta de lo pequeño que se es.

Ahora pregunto... si después de hablar tanto de la gente que los demás equipos meten en la cancha, y yendo puntero aunque sea por momentos, llevan tan poco público, la conclusión es que... más no tienen. Eso sí, la tribuna popular queda muy bonita con ese techo que le han construido.

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